No amemos al mundo - 27 de Enero 2025
- Princesas y Guerreras

- 27 ene
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No amemos al mundo
1 Juan 2: 15
15 No améis al mundo, ni las cosas que están en el mundo. Si alguno ama al mundo, el amor del Padre no está en él.La voluntad de Dios es muy clara: que no amemos al mundo. Esto definitivamente no quiere decir que debamos vivir fuera del mundo o aislados de éste (1Corintios 5:9-10); tampoco quiere decir que odiemos el mundo. Sencillamente quiere decir que no pongamos nuestro corazón, nuestra devoción, nuestra confianza y esperanza en las cosas del mundo.
Cuando la Biblia menciona el "mundo" puede referirse al planeta donde vivimos, al conjunto de las naciones, a la raza humana o, como en este caso, al sistema corrupto de las cosas y los valores de este mundo caído. En 1 Juan 2:15 el amor al mundo nos habla del interés y el apego a todo lo que da lugar al orgullo, al egoísmo y a otros pecados. El deseo y la admiración por lo atractivo del mundo se opondrán al amor y a la dedicación que debemos dar a Dios y a Su voluntad.
Observa en tu vida las actividades, las ideas, los sentimientos, o los pasatiempos, todo aquello que ha tomado el lugar de Dios en tu corazón. ¿A qué dedicas más tiempo, esfuerzo y dinero? No está mal soñar con tener cosas mejores en la vida. El problema llega cuando esas mismas cosas se convierten en lo más importante para ti. El amor del Padre debe ser lo primero en tu corazón. Todo lo demás es una añadidura, no lo principal
Mientras enfrentamos las tentaciones y las trampas del mundo, es crucial mantener el amor de Dios como nuestra principal prioridad. Amar a Dios por encima de todo significa ponerlo en el centro de nuestra vida, buscar Su voluntad y desear agradarle en todas nuestras elecciones y acciones. Dios mismo nos llama a amarlo con todo nuestro ser. En Deuteronomio 6:5, encontramos este llamado divino: “Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón y con toda tu alma y con todas tus fuerzas”. Amar a Dios por encima de todo requiere una entrega total a Él. Significa que nuestra identidad, valores, prioridades y propósito están cimentados en Su voluntad y principios. Jesús reitera esta verdad cuando enseña en Lucas 9:23): “Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, tome su cruz cada día y sígame”.
Pídele a Dios que te ayude a identificar las áreas o tendencias mundanas a las cuales te has inclinado.
Determina en Tu corazón darle el primer lugar a Dios y de qué maneras puedes hacerlo.
Oración:
Señor, Perdóname cuando me siento tan atraída por las cosas de este mundo. Ayúdame a mantener los ojos firmes en Jesucristo y a amar las cosas que realmente importan en esta vida. Que el amor del Padre permanezca en mí y que yo pueda amarte por encima de todas las cosas. En el nombre de Jesús, Amén.
Dios te bendiga
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