Una entrega absoluta que da vida - 26 de Marzo 2024
- Princesas y Guerreras
- 26 mar 2024
- 2 Min. de lectura
Una entrega absoluta que da vida
Juan 12: 20-26
24 En verdad, en verdad os digo que si el grano de trigo no cae en tierra y muere, se queda solo; pero si muere, produce mucho fruto. 25 El que ama su vida la pierde; y el que aborrece su vida, en este mundo, la conservará para vida eterna.Resulta muy interesante que, en Jerusalén, un grupo de griegos quisiera hablar con Jesús. Recordemos que los griegos eran pensadores y filósofos, cautivados por la búsqueda de la sabiduría, y se interesaron en la persona de Jesús. Jesús define el propósito de Su vida comparándola con un grano de trigo. El grano de trigo tiene que caer en la tierra y tiene que morir para dar abundante fruto. (Juan 9: 20-26)
Por medio de un sencillo proceso natural que cualquiera podría observar y entender, Jesús les revela la necesidad de Su muerte en la Cruz, a fin de llevar mucho fruto para Dios. Él hace referencia al hecho de que las semillas sólo pueden producir plantas y frutos si previamente mueren en la tierra. Los discípulos rechazaban la idea de que Jesús tuviera que morir, pero tal como les explicó con esta sencilla ilustración, negarse a enterrar la semilla a fin de evitar su muerte, implicaría que serían privados de cualquier cosecha. Su vida perfecta, sus increíbles milagros, o sus maravillosas enseñanzas, nunca podrían traer salvación a los hombres. Sólo Su muerte en la Cruz podría traer la bendición y la vida eterna a incontables almas necesitadas de salvación.
El principio involucrado aquí es que no se puede producir vida sin dar la propia. En este contexto la vida es el fruto del amor que se entrega sin reservas, hasta desaparecer si es necesario. El Señor ya había anticipado este mismo principio cuando dijo: "Yo soy el buen pastor; el buen pastor su vida da por las ovejas" (Juan 10:11). Dar la propia vida es la suprema medida del amor divino. A los discípulos les podía parecer una pérdida, pero era la clave del éxito absoluto de la misión de Jesús.
Por esta razón, la muerte de Cristo no se presenta en ningún momento como una tragedia, sino que siempre es contemplada como una pérdida que termina con ganancia, como una inagotable fuente de vida espiritual para todo el mundo. La tragedia habría consistido en negarse a hacerlo. El Señor dijo que "si el grano de trigo no cae en la tierra y muere, queda solo"., si Cristo no hubiera entregado su vida por nosotros, nunca podríamos tener vida eterna y la esperanza de estar con Él para siempre.
¿En qué área de tu vida quieres dar fruto? (espiritual, familiar, profesional, personal, etc.)
¿Cómo sería nuestra vida si permanentemente nos comprometemos con Dios a morir a esos deseos pecaminosos que no dan fruto para vida eterna?
Oración
Señor, te pido hoy que me ayudes a morir a los deseos que no darán fruto para vida eterna. En el nombre de aquél que murió por mí, Jesús, amén.
Dios te bendiga
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