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9 cualidades de la mujer virtuosa
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18/09/21
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9 cualidades de la mujer virtuosa
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Una mujer virtuosa es una mujer bendecida que vive de acuerdo con los principios de Dios y conforme a su voluntad. Cuando una mujer dedica su vida al servicio del Señor, ella se convierte en una bendición para otros, en alguien que marca la diferencia en la vida de su familia y en la de los demás. Aquí hay algunos versículos de la Biblia en los que vemos las cualidades de una mujer virtuosa:
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1. Valiosa (Proverbios 31: 10). ¿De dónde viene el valor de esta mujer virtuosa? No es un valor basado en sus posesiones sino uno que surge de su interior, de un corazón lleno del amor de Dios que busca bendecir a los demás con su comportamiento y con sus palabras.
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2. Trabajadora (Proverbios 31:13–15). Usa sus talentos y destrezas trabajando fuerte para proveer a su familia. Planifica bien su día y lo aprovecha al máximo.
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3. Buena administradora (Proverbios 31:16–19). Usa bien sus recursos sin desperdiciar o dejar las cosas al azar. Administra con sabiduría todo lo que tiene, invierte su tiempo y sus recursos para obtener el mayor beneficio.
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4. Generosa (Proverbios 31:20). Está atenta a los que tienen necesidades y comparte sus bendiciones con ellos. Tiene un corazón generoso y se deleita en ayudar a los demás.
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5. Da buen ejemplo (Rut 3:11). Es conocida por sus buenas obras, su buen corazón y el buen ejemplo que da aun en circunstancias difíciles.
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6. Temerosa del Señor (Proverbios 31:30). Sabe que lo más importante es el temor del Señor, vivir de acuerdo con su voluntad y sus mandatos. No busca impresionar a los demás con su belleza exterior, sino que se distingue por su deseo de agradar a Dios.
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7. Sabia (Proverbios 14:1). Toma decisiones sabias que construyen y bendicen a su familia. Sabe que su actitud puede hacer que el sol brille en el corazón de la familia o que se desate la tempestad, y escoge la primera opción.
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8. Su belleza fluye del interior (1 Timoteo 2:9-10). Tiene cuidado de su apariencia exterior y busca honrar a Dios con todo su ser. Su énfasis está en tener un corazón que agrada a Dios, en cultivar la belleza que fluye desde el interior.
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9. Instruye y anima a las más jóvenes (Tito 2:3–5). Con el pasar de los años madura, aprende cómo agradar a Dios como mujer y como esposa. Decide compartir su conocimiento y sabiduría con las más jóvenes y las anima a buscar que Dios sea glorificado en sus vidas.
Dios las bendiga
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